ROUND 1: EL DEBATE DEL 25 DE FEBRERO EN CALIENTE

Escribo estas líneas cuando el debate, bueno, el cara a cara entre José Luís Rodriguez Zapatero y Mariano Rajoy ha terminado hace apenas unos minutos. El análisis que vas a leer a continuación es por lo tanto en caliente, con la memoria fresquita. Intentaré ser lo más objetivo posible (aunque alguno crea que es impoible, que lo es, lo es).

Se esperaba con muchas expectativas este debate tras quince años de ausencia. Lejano nos queda aquel que enfrentó a Felipe González y José María Aznar, yo casi ni me acuerdo, era muy pequeño.

Pero vamos al meollo de este debate. En primer lugar he de indicar algo que no me ha acabado de agradar, y es que revisaban permanentemente el pasado en detrimento de las propuestas, el programa que desarrollarán en la próxima legislatura. En gran medida ha sido un monólogo a dos bandas, o un diálogo de sordos, cada uno tenía sus papelitos, milimétricamente preparados, perfectamente diseñados, nunca podrán responder al contrario en un formato tan encorsetado como este, con todos los elementos en juego tan pactados y controlados.

Intuíamos que cada uno pondría en juego un rol en el que escenificaría que tiene razón frente al otro, que los datos que aportaba el contrario eran falsos y los suyos eran los únicos verdaderos. Cada cual ha hecho su guerra. Ha sido tenso pero interesante con los reproches a los que nos han acostumbrado durante toda la legislatura.

Se echa de menos frescura, sobre todo cuando hemos visto fragmentos de debates en las televisiones estadounidenses, donde los contendientes pueden andar, reciben preguntas de los asistentes y no hay guiones estudiados, si no espontaneidad. Pero es lo que hay, las campañas se han convertido en campos de batalla donde pelean los cabezas de cartel apoyados por hordas de politólogos y asesores de todo pelaje. Eesperamos a que hayan más Tengo una pregunta para usted, mucho más amenos por la imprevisión de las preguntas de los ciudadanos.

Zapatero, a priori, tenía las de ganar, ya que un presidente que defiende los logros de un gobierno parte en ventaja, frente a un candidato que aspira a lograr la victoria. Claro, que no me ha gustado que en varios pasajes interrumpiera a su adversario político, rompe la rigidez, es cierto, pero es descortés. Ha hablado con la seguridad de quien conoce los datos que ha manejado durante toda la legislatura, pero mirando en exceso al pasado.

Rajoy ha iniciado el debate mucho más nervioso, en su alocución inicial leía en exceso su guión y desviaba la mirada hacia no se sabe dónde. Las apreciaciones a cerca de la inmigración han sido tan desgraciadas como aquellas que ha hecho el esbirro Arias Cañete, ha vuelto a vincular inmigración con delicuencia (puedes leer mi artículo Efecto Expulsión, en el que trato este asunto) y en este tema específico ha estado recurrente, en exceso, llegando a recriminar al presidente que no hablaba de inmigración, aunque parecía no oir como respondía que tenía previsto tratar este tema. Como no, el otro tema estrella ha sido el terrorismo, con esa manipulación nauseabunda que ha utilizado durante estos cuatro años, tanto que ha acusado de nuevo al candidato socialista de "agredir a las víctimas del terrorismo".

Rajoy, además de mentir, o no querer acordarse, de aseveraciones que ha realizado y que han quedado registradas en numerosos medios, ha apelado al corazón y a la lágrima en la última alocución.

Zapatero por su parte ha intentado encajar los duros golpes de su rival con cierta pesadez al inicio y conforme avanzaba el debate estaba más suelto. Ha querido conciliar, acercándose a términos como paz, justicia o cultura.

Esperamos a la semana que viene, en la que esperamos que alguno de los dos empiece a dar datos de sus programas electorales, porque creo que los ciudadanos desean conocerlos para votar en consecuencia. Deberían de apagar el ventilador y dejar de salpicar porquería.

P.D: El Follonero (ese colaborador impertinente de Andreu Buenafuente) votará a Zapatero, ya que ha sido el primero en nombrar a Javier Bardem (por cierto, enhorabuena por ese merecidísimo Oscar, enésimo galardón), casi al final, en su penúltima intervención.

Última hora: Según una encuesta de urgencia, encargaba por La Sexta, Zapatero ganaría el debate, con un 45% de votos frente al 30% de Rajoy. En Cuatro se repiten los resultados. También gana Zapatero en la edición digital de Abc.

Debe ser muy grande el placer que proporciona el gobernar, puesto que son tantos los que aspiran a hacerlo.
Voltaire (1694-1778) Filósofo y escritor francés.

Posted in: 25 febrero, 9 marzo, cara a cara, debate, politica, PP, PSOE, Rajoy, Zapatero