14:40
Santiago Vañó Candeal
Internet tiene el poder de magnificar algunos fenómenos que hace unos años hubieran sido exclusivamente locales. El último ejemplo lo encontramos en Susan Boyle. Voy a explicar este caso:
En el Reino Unido se emite un programa titulado Britains got talent, este programa se ha versionado en nuestro país, en Telecinco, bajo el título Tú sí que vales. La mecánica de este concurso es sencilla: alguien muestra su talento delante de un jurado compuesto por tres personas, si al menos dos jurados deciden que el concursante no debe continuar se va a casa y punto pelota. Pues en estas que apareció Susan Boyle, un mujer británica de 47 años que, según su propia confesión, nunca ha tenido novio ni nunca la han besado (es curioso, los británicos ebrios son bastante cariñosos, los he visto en Benidorm a puñados). No es muy agraciada, su look es bastante extravagante, viste un vestido que podríamos calificar como típico de abuela inglesa, vamos de esos que vestía la Reina Madre junto a las pamelas. Susan es desgarbada, feucha, parece una friki más.
Claro, a estos concursos se suelen presentar decenas de personas que creen que su talento es interesante, pero suele consistir en cantar canciones estúpidas con una voz infame, o tirarse pedos al compás de alguna melodía famosa, o hacer malabarismos con azadas mientras hacen un streaptease. Frikis. En un principio Susan parece que pertenece a una de estas categorías, de los que creen que cantan bien pero en realidad son horribles.
El público se prepara para la actuación, hacen gestos de desprecio hacia el aspecto de la concursante, el jurado se impacienta pensando en que tendrán que soportar una actuación destinada a la carcajada doméstica, de esas que hacen subir un poco la audiencia. Seguro que más de uno piensa: "¿Y ésta que viene a hacer aquí?". Susan comienza a hablar, cuenta de donde viene, que hace, su edad, incluso hace un gesto sexy que tiene más de grotesco que de sensual (y más viéndolo con un plano general). A la pregunta de Simon Cowell, creador del formato y de Factor X, responde que va a cantar I dreamed a dream una canción del musical Los Miserables, que hizo conocida la cantante Elaine Page.
Y Susan empieza a cantar. Entonces todo desaparece excepto su voz. El público abre los ojos de par en par sorprendido ante la belleza de la voz de Susan. El jurado está estupefacto, ni en sueños se imaginaron esto. El patito feo se ha convertido en cisne. Todos los prejuicios que atesoró su aspecto físico han quedado desterrados en cuanto a comenzado a cantar.
Estamos ante una auténtica lección de humildad, todo el mundo se rinde ante Susan. El público aplaude entusiasmado. El video colgado en YouTube está batiendo records, sólo el video "oficial" ha alcanzado más de siete millones de visitas, si sumamos las visitas del mismo video colgado por otros usuarios (hay más de 800 videos con la entrada Susan Boyle sólo en este portal) la cifra se dispara.
No voy a contarte más, quiero que lo veas tú, como otras personas ya lo han visto. Quizás no te sorprendas por lo que aquí te he contado. Creo te emocionarás, Ashton Kutcher confiesa en su Twitter que su mujer (Demi Moore) lloró al verlo. Aunque la mejor lección es el baño de humildad que nos da Susan. Bravo por ella. Que tenga mucha suerte.
En el Reino Unido se emite un programa titulado Britains got talent, este programa se ha versionado en nuestro país, en Telecinco, bajo el título Tú sí que vales. La mecánica de este concurso es sencilla: alguien muestra su talento delante de un jurado compuesto por tres personas, si al menos dos jurados deciden que el concursante no debe continuar se va a casa y punto pelota. Pues en estas que apareció Susan Boyle, un mujer británica de 47 años que, según su propia confesión, nunca ha tenido novio ni nunca la han besado (es curioso, los británicos ebrios son bastante cariñosos, los he visto en Benidorm a puñados). No es muy agraciada, su look es bastante extravagante, viste un vestido que podríamos calificar como típico de abuela inglesa, vamos de esos que vestía la Reina Madre junto a las pamelas. Susan es desgarbada, feucha, parece una friki más.
Claro, a estos concursos se suelen presentar decenas de personas que creen que su talento es interesante, pero suele consistir en cantar canciones estúpidas con una voz infame, o tirarse pedos al compás de alguna melodía famosa, o hacer malabarismos con azadas mientras hacen un streaptease. Frikis. En un principio Susan parece que pertenece a una de estas categorías, de los que creen que cantan bien pero en realidad son horribles.
El público se prepara para la actuación, hacen gestos de desprecio hacia el aspecto de la concursante, el jurado se impacienta pensando en que tendrán que soportar una actuación destinada a la carcajada doméstica, de esas que hacen subir un poco la audiencia. Seguro que más de uno piensa: "¿Y ésta que viene a hacer aquí?". Susan comienza a hablar, cuenta de donde viene, que hace, su edad, incluso hace un gesto sexy que tiene más de grotesco que de sensual (y más viéndolo con un plano general). A la pregunta de Simon Cowell, creador del formato y de Factor X, responde que va a cantar I dreamed a dream una canción del musical Los Miserables, que hizo conocida la cantante Elaine Page.
Y Susan empieza a cantar. Entonces todo desaparece excepto su voz. El público abre los ojos de par en par sorprendido ante la belleza de la voz de Susan. El jurado está estupefacto, ni en sueños se imaginaron esto. El patito feo se ha convertido en cisne. Todos los prejuicios que atesoró su aspecto físico han quedado desterrados en cuanto a comenzado a cantar.
Estamos ante una auténtica lección de humildad, todo el mundo se rinde ante Susan. El público aplaude entusiasmado. El video colgado en YouTube está batiendo records, sólo el video "oficial" ha alcanzado más de siete millones de visitas, si sumamos las visitas del mismo video colgado por otros usuarios (hay más de 800 videos con la entrada Susan Boyle sólo en este portal) la cifra se dispara.
No voy a contarte más, quiero que lo veas tú, como otras personas ya lo han visto. Quizás no te sorprendas por lo que aquí te he contado. Creo te emocionarás, Ashton Kutcher confiesa en su Twitter que su mujer (Demi Moore) lloró al verlo. Aunque la mejor lección es el baño de humildad que nos da Susan. Bravo por ella. Que tenga mucha suerte.
La humildad es una virtud tan práctica, que los hombres se figuran que debe ser un vicio.
Gilbert Keith Chesterton (1874-1936) Escritor británico.
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3 comentarios:
Gracias por el comentario y por añadirme. La verdad es que tenía el blog bastante parado, pero ahora ... me ha vuelto a entrar el gusanillo, así que ya lo mantendré más al día.
besitos
Increible. De verdad. Sólo curiosidad... ¿Cómo te enteraste?
Bravo por Susan. Menuda lección ^^
Para Olatz: Siempre es un gusto añadir blogs de calidad, jeje
Para Laura: Por primera vez la vi en la sección de Miki Nadal en Se Lo Que Hicisteis, y después lo vi completo en YouTube. Vaya planchón para jurado y parte del público
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