PASEN Y VEAN

La dejadez de la Conselleria de Educació de la Generalitat Valenciana es tal que a los vecinos de Valencia tenemos la oportunidad de observar con estupor imágenes como esta. Me parece que sobran las palabras. Esta imagen que cuanto menos es curiosa.

Es la conjunción de elementos lo que provoca el estupor. En primer lugar encontramos un solar en el que sendos carteles (de esos que crecen en solares y descampados valencianos y languidecen sin cumplir su palabra) rezan al unísono:

AÇÍ EL TEU NOU CONSERVATORI / Construcció del nou conservatori professional de dansa / València / Característiques: 18 unitats de grau elemental / 8 unitats de
grau mitjà / Generalitat Valenciana Conselleria de Cultura, Educació i Esport /
CreaEscola / Ciegsa

AQUÍ TU NUEVO CONSERVATORIO /
Construcción del nuevo conservatorio profesional de danza / Valencia /
Características: 18 unidades de grado elemental / 8 unidades de grado medio /
Generalidad Valenciana Consejería de Cultura, Educación y Deporte / CreaEscuela
/ Ciegsa

(La traducción es propia, con el toque que Canal Nueve querría en sus informativos).

La foto no tendría nada de extraordinario si aparecieran unas obras tras los carteles, pero no, la Conselleria prefiere que este solar lo ocupe ¡un circo! Puedo suponer que es eventual, aunque teniendo en cuenta la forma de gestionar de la Conselleria no sería extraño que adquieran la carpa para situar bajo las clases de danza prometidas, eso sí, negarían sistemáticamente la existencia de esta carpa como Conservatorio, tal y como hacen con los barracones que toda se encuentran, en numerosos centros escolares a lo largo y ancho de la Comunitat Valenciana.

Estas situaciones que provocan la hilaridad del respetable, se convierten en grotescas cuando leemos en prensa noticias como esta, aparecida ayer (23 de diciembre) en la prensa local valenciana: El sobrecoste del Palau de les Arts da para 94 colegios. La Generalitat lleva gastados 367 millones [de euros, of course] en la construcción del edificio, 283 más de lo previsto al inicio. Menos mal que la noticia únicamente habla del Palau de les Arts (ese que sirve tanto para óperas a ciento y pico euros como para estrenar por cuarta vez películas de James Bond, abonando un millón de euros), la cuenta suma y sigue con el despilfarro del puente de l'Assut de l'or y sus reformas pre-apertura, la construcción de l'Àgora, y otros tanto agujeros (casi negros) que tiene la Ciudad de las Artes y las Ciencias y que intenta subsanar alquilando los espacios para celebrar cenas de galas y regalando entradas para corregir el déficit de visitantes. Y es que las empresas públicas creadas por la Generalitat Valenciana están constantemente en el punto de mira por coquetear con lo delictivo, como Ciegsa, que se encarga de la construcción de los centros escolares y del conservatorio hoy inexistente. En una reciente campaña publicitaria se vanagloria de haber construído 300 en cinco años, aunque no todos estén acabados aun habiéndose inaugurado. Entre planos, licencias de obra y demás papeleo guardan facturas sin justificar, ay, ay, mal ejemplo parecerse a Terra Mítica. Para rizar el rizo y para coronar la hazaña, este circo-conservatorio está situado justo enfrente del Palau de les Arts. Doble mortal sin red.

Alejandro Font de Mora, ese Conseller con pinta de director de circo, es capaz de ejecutar todos los roles que se suponen dentro de un circo: trapecista, funambulista, domador de fieras, mago escapista, tragasables... No, no voy a decir ese que estás pensando, una profesión en la que se hace reir a los niños merece todos mis respetos y ni lo emplearé como insulto (aunque el cuerpo me lo pida). Afortunadamente ha querido recular, momentaneamente al menos, con esa norma de dar Educación per la Citizenship en dos lenguas, por lo que ha sido el hazmerreír de toda España. Fue el día 16, veinticuatro horas antes de una huelga general en la educación pública valenciana y que se descombocó al saberse la decisión del conseller. Él lo agradeció subiendo el sueldo a los directores de los centros educativos. Estamos en Navidad, un aguinaldo alegra.

Pasen y vean, el más dificil todavía lo ejecuta el aguerrido y bravo Font de Mora. Lo único que le pido a la Navidad (soy más de Reyes Magos, pero si son regalos no desprecio a Papá Noel) es que lo convierta en hombre-bala, para que salga disparado. Los vecinos del circo pensarán lo mismo, ya que les ha fastidiado un aparcamiento gratuito fenomenal y enorme, aunque cuando llueva se convierta en un barrizal cenagoso.

PD: No quiero despedirme sin desearte, bloguer@ de mis entrañas, una felicísima navidad, con poca familia pesada alrededor y muchos regalos de los seres queridos (aunque si no es muy querido pero el regalo es bueno...). No te atiborres a langostinos, turrón y cava. Ojalá el espíritu navideño, esos buenos propósitos para con los niños y los pobres durara 365 días, pero todos tenemos un punto hipócrita, yo el primero. Disfruta estos días.

Al mal circo le crecen los enanos.

Refrán popular

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